Las instituciones, lo formal, el protocolo. Los paradigmas, las estructuras, los cargos. Lo correcto, lo indebido, lo que no importa, lo que no se ve, lo que se ve y no importa.
Tanta cáscara desvía el objetivo y olvida la belleza, la gracia de las cosas. Lo rústico puede ser
áspero y causar rechazo, pero es transparente y sus miserias son tan visibles como sus virtudes.
Así también podemos analizar la concepción del hombre y redactar la constitución más pelotuda -y conmovedora- de las personas para que tengamos una ayuda memoria y recordemos que, aunque esto sea una estructura, un fomato predeterminado, la vida está llena de factores que alteran las situaciones y son estos a los que debemos amoldarnos.. hoy aprendí que tengo que dejarme penetrar por la vida: que la vida me haga el amor o me termine rompiendo el culo. (toda una señorita..)
ARTÍCULO 1: Queda decretado que ahora VALE LA VIDA, que ahora VALE LA VERDAD, que dándonos las manos vamos a trabajar todos juntos por la unión verdadera.
ARTÍCULO CHÚ (two): Queda remil decretado que todos los días de la semana , INCLUSIVE LOS MARTES MÁS GRISES tienen derecho a convertirse en un sábado a la tarde.
ARTÍCULO 3: Queda decretado que, a partir de YA MISMO, van a haber gerberas en todoos los ventanales, y que todos van a tener derecho a abrirse en la sombra; y que las ventanas deben permanecer abiertas el día entero para el verde donde crece la esperanza.
ARTÍCULO CUATRO: Queda decretado que el hombre no precisará nunca más dudar del hombre. Que el hombre confiará en el hombre, como la palmera confía en el viento, como el viento confía en el aire, como el aire confía en el prado sembrado de nubes al que llamo cielo.
PARÁGRAFO ÚNICO: EL HOMBRE CONFIARÁ EN EL HOMBRE COMO UN NIÑO CONFÍA EN OTRO NIÑO, SIN OBJECIÓN.
ARTÍCULO 5: Queda declarado que los hombres están libres del yudo de la mentira. Nunca más han de necesitar la coraza del silencio, ni la armadura de las palabras y admito que preciso usar de este articulo, a la fuerza. Si de verdad así fuera, el hombre podría sentarse a la mesa con la mirada limpia, porque la verdad pasará a sser servida antes del postre, y seria mucho más dulce.. Podría reprochar a Joaquín Sabina cuando dice: Yo le quería decir la verdad por amarga que fuera...
ARTÍCULO SEEEEIS: Queda establecida durante 1.000 siglos, la practica soñada por el profeta Isaías. EL LOBO Y EL CORDERO COMERÁN JUNTOS DEL MISMO PASTO Y LA COMIDA DE AMBOS VA A TENER EL MISMO SABOR A AMANECER.
Artículo 7: Por decreto indefectible queda establecido el reinado permanente de la justicia y la claridad para todas nuestras víctimas de la Historia pasado, y vamos a gozar de un manto de claridad y visión certera del ahora para no llorar ni lamentar a futuro. La alegría será una bandera generosa que flameará por siempre en el alma de nuestro pueblo.
Artículo oito: Decreto con la autoridad que se me concede a esta hora de la noche que el mayor dolor siempre fue y será siempre, siempre, siempre no poder dar amor a quien se ama porque como dice el refrán "El agua es quien da a la planta el milagro de la flor." Esas cosas no se pueden alterar.
Artículo 9 creo: Que el pan de cada día tenga la señal del sudor derramado por el hombre para conseguirlo, sin muertes, ni olvidos, ni hurtos, ni actos que no perjudiquen a otros ni a sí mismos. Que llegue caliente, que sea mucho, que sea sabroso pero sobre todo que tenga el sabor de la fraternidad y el amor.
Artículo 10: Será legitimo que el hombre use color rosa y la mujer use borcegos.
Artículo Once: Por definición el hombre es un animal que ama y piensa, que por eso es bello, pero no menos que los que no lo hacen por lo tanto no matará a otros animales por diversión ni por engordar su bolsillo.
Artículo 12: En los festejos el agasajado será merecedor de cuantos abrazos precise y más de lo mencionado en el código penal, sin pago de multa ni condena. En fechas no conmemorativas, merecerá mucho más que eso. En crisis sentimentales no habrá límites.
Artículo 13: Será penado el olvido de nuestros orígenes (espacio geográfico, tiempo, costumbres, amigos, etc.)
Nunca los bolsillos han de ser más profundos que la gracia propia.